Cólico del bebé ¿Cómo reconocerlo
A mother calming her baby and holding it in her arms.

cuidado e higiene del bebé

Cólico del bebé ¿Cómo reconocerlo?

Cómo reconocer los cólicos del bebé y qué hacer con ellos


Cuando los bebés lloran con frecuencia, rápidamente nos viene a la mente un término que muchos conocen: "Cólicos del lactante". Aunque todo el mundo parece saber algo, no siempre son fáciles de tratar porque no son una enfermedad fácilmente definible o diagnosticable. ¿Qué son realmente los "cólicos del lactante"? ¿De dónde vienen y, sobre todo, cómo puedo ayudar a mi bebé si sufre dolor de tripa?

¿Qué son los cólicos del lactante? 

Alrededor del 80 % de los lactantes sufren de flatulencias frecuentes en los primeros tres meses de vida, y en alrededor del 10-15% de los/as niños/as esto también puede dar lugar a dolores abdominales extremadamente severos. Siempre que se excluyan otras enfermedades, se denomina "cólico del lactante".


Cómo reconocer los cólicos del lactante:

  • Por la duración y frecuencia de los periodos de llanto: más de 3 horas al día, más de 3 veces a la semana durante un total de más de 3 semanas (esta es la definición de "bebé llorón" según Morris Wessel)
  • El/la bebé apenas se puede calmar
  • La hora típica es a última hora de la tarde, a menudo también después de las comidas
  • Los síntomas que acompañan al periodo de llanto pueden ser palidez, sudoración, tensión en las piernas, flatulencia o mejora después de que los vientos hayan desaparecido

    Los cólicos o el aumento del llanto suelen comenzar en las primeras semanas de vida y disminuyen a medida que el bebé crece.


    Motivos de los cólicos del lactante

    En el 95 % de los casos, no se encuentra ninguna causa física para el llanto.  Las teorías van desde la hipersensibilidad general hasta los trastornos digestivos, como el aumento de los movimientos intestinales o la escasa actividad intestinal. Se recomienda descartar primero las causas orgánicas antes de hacer el diagnóstico de "cólico del lactante".


    5 causas físicas de los cólicos:

    • Alergia a la leche de vaca
    • Intolerancia a la lactosa
    • Reflujo
    • Infecciones
    •  Lesiones


    En estos casos, debes consultar con tu médico/a el tratamiento adicional.

    Mother gently massaging baby belly

    Ayuda con el cólico del lactante o para los bebés llorones

    Muchos padres y madres se desesperan cuando el bebé llora persistentemente, después de todo no solo es desgarrador sino que también pone a prueba sus propios nervios. Los siguientes puntos pueden ser útiles:

    • Entorno relajado (por ejemplo, atenuar las luces) para que el/la bebé pueda calmarse más fácilmente
    • Un día bien estructurado con horas fijas para dormir y comer
    • Llevar el/la bebé mucho en el cuerpo (idealmente con un fular o un portabebés ergonómico)
    • Mantener un ritual para conciliar el sueño
    • Canto relajante o       masaje para bebés: esto se puede hacer diariamente a partir de la 4. semana. Con un poco de aceite, se realizan movimientos "masajeantes", por ejemplo, dando vueltas alrededor del ombligo o con los pulgares alejándose del mismo. Mejor 1 hora antes o después de comer o bañarse. Deja que una matrona, te muestre los movimientos correctos de las manos.
    • En cualquier caso, quédate con el bebé cuando llore.
    • Si sientes que es demasiado para ti: busca ayuda y consejo profesional de tu médico o médica.
    • Si no estás dando el pecho: existen biberones especiales anticólicos que evitan que el/la bebé trague demasiado aire. Casi el 80 % de las madres que participaron en un estudio con biberones anticólicos MAM confirmaron una mejora o reducción del llanto y los cólicos abdominales.


    Si hay clínicas de llanto en tu zona, son un lugar perfecto para acudir. Están especializadas en tratar a los "bebés llorones" y, por tanto, ofrecen a los padres y las madres estresados/as ayuda y apoyo profesional.

    ¡Pero también puedes pedir consejo a los/as pediatras en esta difícil situación!
    Es importante no sacudir nunca al/ niño/a la niña, ya que la zona del cuello y el cerebro de un/a bebé son muy sensibles y, en el peor de los casos, esto puede provocar una hemorragia cerebral.

    El llanto no es un reproche o una señal de fracaso por parte de los padres; simplemente, el bebé es muy sensible y necesita tiempo para acostumbrarse a las circunstancias, los procesos corporales y el entorno fuera del vientre materno, que es seguro, oscuro y tranquilo. ¡Dale tiempo y aguanta esta fase con paciencia: después de unas semanas como máximos verás que te obsequiarán con una sonrisa feliz y cariñosa!


    Fotos: Shutterstock

    Fuentes:

    Pediatría y pedología. Revista Austriaca de Pediatría y Medicina del Adolescente: Reflujo gastroesofágico y cólico del lactante en la práctica pediátrica. Diciembre 2014. N. 06. Páginas 38-40

    Reflujo gastroesofágico y cólico del lactante en la práctica pediátrica, Jornadas pediátricas de la Sociedad Austriaca de Pediatría y Medicina del Adolescente (ÖGKJ) 2014, Pediatría y pedología 6/201

    REDUCTION OF ABDOMINAL COLIC IN INFANTS BY USING BOTTOM VENTILATED BOTTLES, B. Lehner, A. Woppmann, R. Kerbl

    R. Kerbl, Cólicos del lactante ("Colicky infants"), Diario de Médicos de Gaissach, 19/2014, 14-17, 2014