¡Felicidades, por fin estás realmente embarazada! A continuación te explicamos lo que ocurre durante la fecundación y nidación, y si en este momento ya existen síntomas de embarazo.
¿Qué ocurre en este momento dentro del vientre?
Después de la ovulación, el óvulo solo se puede fecundar durante aproximadamente un día. Por suerte para todas las mujeres que quieren quedarse embarazadas, los espermatozoides pueden sobrevivir durante varios días en condiciones óptimas para "esperar" al óvulo.
Normalmente, los espermatozoides y el óvulo se encuentran en el oviducto, donde se produce la fecundación. Si un espermatozoide consigue penetrar el óvulo con éxito, los núcleos de ambas células se van fusionando y se crea la extraordinaria base de cromosomas de tu bebé.
Esta combinación de genes ya incluye sexo, color de los ojos, color del pelo y altura, pero los factores hereditarios de mamá o papá que se van a imponer, se decidirán un poco más tarde.
Incluso antes de la nidación, la célula fecundada se va partiendo continuamente en su camino del oviducto al útero. 5 a 6 días después de la fecundación, esté pequeño montón de células (el llamado "blastocito") se va anidando en el endometrio.
¿Cómo te encuentras en la tercera semana de embarazo?
¿Estás mirando la prueba de embarazo con toda la ilusión? Entonces vamos a aclarar primero la pregunta más importante: ¿A partir de qué momento se puede realizar una prueba de embarazo?
Las pruebas de embarazo comerciales miden la hormona HCG (gonadotropina coriónica humana beta) en la orina. Esta se produce después de la fecundación, por las células que posteriormente se convierten en placenta. La concentración de HCG en la sangre o la orina aumenta cuanto más desarrollado esté el embrión, hasta alcanzar el punto culminante en torno a la 11.ª semana de embarazo.
Estas pruebas pueden indicar un embarazo aproximadamente a partir de 2 días después de la ausencia de la menstruación (14 días después de la fecundación). Las llamadas "pruebas tempranas" incluso lo pueden conseguir 2 días antes de la ausencia de la menstruación. Sin embargo, se debe tener en cuenta que el resultado en este momento todavía puede ser negativo por error. De todas formas, obtendrás el mejor resultado con la primera orina de la mañana, ya que la concentración de hormonas en este momento suele ser la más alta.
Si detectas una ligera hemorragia o partes sangrientas en la secreción vaginal, se puede tratar de una hemorragia de nidación. Habitualmente sale muy poca sangre de color rojo claro. No obstante, también puede ocurrir que se confunda esta hemorragia con el sangrado menstrual. También son posibles dolores ligeros del abdomen, incluso como los habituales previos a la menstruación. Pero muchas embarazadas todavía no notan nada en este momento.
Lo importante ahora para ti y para tu bebé es seguir una alimentación lo más sana y equilibrada posible. Esto incluye sobre todo mucha verdura, productos integrales y buenas fuentes de proteína (carne magra, pescado, legumbres, tofu u otra proteína vegetal). Puede ser que en esta fase estés más sensible a los olores y sabores. Hay embarazadas que ahora rechazan instintivamente el alcohol y, p. ej., el olor a tabaco.6 Esto está muy bien, porque a partir de ahora se debe renunciar al alcohol y al tabaco.
¿Todavía no notas ningún cambio? ¡Tampoco es nada anormal! Hay muchas mujeres que en este estado temprano todavía no notan nada del embarazo.
Deberías aclarar con tu médico si un suplemento nutricional podría serte de utilidad. En muchos casos se recomienda ácido fólico, ya que ayuda a la división celular y puede ayudar a evitar ciertos trastornos del desarrollo del embrión .
Sources:
Natürliche Familienplanung heute, Raith-Paula, Frank-Hermann, Freundl, Strowitzki, 2008, 4th edition
Malteser Working Group NFP, Natürlich und sicher. Das Praxisbuch, 18th edition.